domingo, 23 de noviembre de 2014

Estandares de calidad en agua grado reactivo

¿Cómo se clasifica el agua de acuerdo a su calidad fisicoquímica? ¿Cómo se clasifica el agua de acuerdo a su calidad microbiológica? ¿Qué procesos de tratamiento de agua deben implementarse para obtener agua de alta pureza?


La calidad del agua de uso en el laboratorio o en aplicaciones donde se requiere de agua con un contenido mínimo de impurezas, puede ser establecida en base a diferentes normas o criterios, dependiendo de la institución u organismo que establece los estándares.
La industria de componentes electrónicos, las asociaciones medicas, la industria farmacéutica, etc., establecen sus propios criterios de calidad que, aunque son muy similares, difieren entre si. La ASTM (American Society for Testing and Materials), es la institución más reconocida y que se dedica específicamente al establecimiento de estándares o valores guía para la calidad del agua con estas características.
Los estándares establecidos determinan la calidad del agua por su conductividad que se expresa en micosiemens por centímetro (mS/cm), unidad de medida indirecta del contenido de sales que contiene el agua. La resistividad es lo inverso y sus unidades para el agua de alta pureza son megaohms (MW).
El agua químicamente pura tiene una conductividad de 0.056 mS/cm o 18 MW. Este es el máximo grado de pureza que se puede obtener y es el agua Tipo I de acuerdo a los estándares de la ASTM.

Otros parámetros que caracterizan el tipo de agua son el pH, el carbono orgánico total, sodio, cloruros y sílice.
De estos parámetros, los que son más fáciles de medir y de controlar son la conductividad o la resistividad, los cuales se miden con un conductímetro.
El pH no es un parámetro de calidad del agua, ya que medir el pH al agua de alta pureza no es fácil y se requiere de un electródo especial o se debe agregar sales al agua para poder establecer una diferencia de potencial entre el electródo y la solución.
La sílice sí es muy importante como parámetro de calidad del agua, ya que adicionalmente a la conductividad, la presencia de sílice no afecta la calidad del agua, sino que la sílice se encuentran en solución como ácido silícico que se disocia de la siguiente manera:
H2SiO4   Þ H+ + HSiO3-
El ácido silícico tiene una constante de disociación muy pequeña, por lo que no se disocia fácilmente,
Si el agua se trata con una resina catiónica/aniónica, el HSiO3- se adhiere a la resina y es removido. La ausencia o presencia mínima de ácido silícico es evidencia de que el agua es de alta pureza ya que este ión es el más persistente.

Clasificación del agua de acuerdo a su calidad fisicoquímica


Clasificación del agua de acuerdo a su calidad microbiológica

El agua también es clasificada de acuerdo a su calidad microbiológica, como agua tipo A, B y C






¿Qué calidad de agua requiero?

El agua que se debe emplear en laboratorio está en función de los criterios de calidad del usuario, Para preparación de soluciones de laboratorios como soluciones de titulación, soluciones buffer, para lavado de material de vidrio, etc., el agua empleada puede ser tipo IV y en lo referente a calidad microbiológica Tipo C.
Para trabajos de determinación de metales traza el agua Tipo I, con calidad microbiológica Tipo B, cumpliría las expectativas.
Para biología celular y cultivo de tejidos, pudiese requerirse agua Tipo I, con calidad microbiológica Tipo A.

¿Qué procesos de tratamiento de agua deben implementarse para obtener agua de alta pureza?

La obtención de agua ultrapura no puede obtenerse con un solo proceso, se requiere la combinación de más de uno de ellos para lograr la calidad deseada tanto en lo fisicoquímico como en lo microbiológico. Como complemento se requiere de un tratamiento continuo y reiterativo para preservar e incrementar su calidad.
Una forma de lograrlo es filtrando el agua de la red de suministro en filtros de sedimentos y de carbón activado, para eliminar partículas y cloro residual. Esta agua pasa a una unidad de ósmosis inversa, donde se eliminan las sales disueltas con una eficiencia de 95-98%.
La remoción de sales por una membrana de ósmosis inversa no es suficiente si el agua que se pretende producir es de calidad I, II o III, por lo que el producto de la ósmosis pasa a un lecho mixto de resinas catiónicas/aniónicas, mezcladas entre sí en forma tal que los equivalentes de cada resina son los mismos.
El agua que sale de este lecho de resinas mixtas no necesariamente cumple con los estándares de calidad y es conveniente reciclar y pasar continuamente el agua a través de la resina mixta. Esto no solo incrementa en cada paso su calidad, sino que también el agua almacenada pierde sus cualidades, por lo que el reciclado continuo es muy conveniente.
Eventualmente la resina de pulido se satura y es necesario su cambio por resina nueva. Este cambio de resina se debe hacer a criterio del usuario, estableciendo el mismo sus límites de calidad en el agua de consumo.
Si el agua producto no se emplea continuamente y se almacena por periodos, no solo disminuye su calidad fisicoquímica, sino también microbiológica.
Cuando el agua circula, se intercala una lámpara UV de 254 nm para desinfección del agua y una segunda lámpara UV de 185 nm para destrucción de la materia orgánica al nivel de trazas que siempre se genera cuando el agua está en contacto con la resina mixta y demás componentes del equipo.
Esta configuración produce agua de optima calidad en sus parámetros fisicoquímicos y microbiológicos, agua de calidad tanto para determinación de metales a niveles ultratraza, y libre de carbono orgánico residual y otros componentes químicos que causan señales no deseadas en sus equipos de cromatografía o en sus pruebas bioquímicas.